Setas y Samaín, feliz maridaje en los centros educativos
Tiene razón la profesora Sandra Filgueira: «El otoño llena de color». Ella se refiere a su colegio, el CEIP pontevedrés Santo André de Xeve, un centro muy activo que desde hace varios años lleva adelante sus Jornadas Micológicas, ofertadas desde el Servizo de Normalización da Lingüística del Ayuntamiento de Pontevedra en colaboración con la asociación Brincabois. Pero la afirmación inicial vale para toda Galicia.
De micología saben mucho también en el CEIP Agro do Muíño, de Ames, y la profesora Yolanda González explica el porqué: «Beli, una de las cuidadoras, es miembro de la asociación Sendeiriña Nicraria Tamara, con sede en Negreira, y realiza charlas durante el otoño pasando por las aulas». Ahí aprovecha para mostrar las setas que encuentra en los montes cercanos.
El Santo André y el Agro do Muíño son dos de los más de tres centenares y medio de centros que participan este curso en Voz Natura, una iniciativa de La Voz de Galicia y la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre que cuenta con el apoyo y respaldo de la Xunta, la Diputación de A Coruña, la Fundación Alcoa, El Corte Inglés, la Fundación Ramón Areces e Inditex.
Las setas son una de las muchas pasiones del pontevedrés. «Primero, el alumnado de sexto de Educación Primaria recibe una charla por parte de la asociación Brincabois comentando diversos aspectos del mundo micológico —explica Sandra Filgueira—. Después salimos al monte comunal que nos rodea para llevar a cabo una recogida de setas y a continuación se lleva a cabo una exposición de los distintos tipos en la entrada del centro».
Esa exposición está abierta a toda la comunidad educativa y a los alumnos tanto de educación infantil como de primaria. Y una buena idea que nunca olvidan: se aprovecha esa salida al monte para recoger basura. Para la profesora, «esta actividad es muy enriquecedora porque además de acercar al alumnado al entorno próximo permite conocer la diversidad micológica de nuestros montes y su importancia».
La semana pasada fue también la del Samaín. En el caso de Xeve, fue un Samaín temático ya que estaba dedicado al cine. En el CEIP Agro do Muíño se felicitaron porque salió de matrícula de honor la exposición de calabazas, así como la fiesta, una cita que, todos los años, «la chavalada espera con muchas ganas, ya que se decora el pabellón con las calabazas que trajeron, se encienden velas y todo eso causa una sensación fantasmagórica», en palabras de Yolanda González. Porque en Ames también brillan los colores del otoño. Lo aprovecharon el pasado día 29, cuando los alumnos del Agro do Muíño hicieron una caminata «y observaron la flora que había por el camino». Y con buen tiempo, además. Y vienen los magostos. Un alegre sinvivir en los cuatro puntos cardinales.