Voz Natura integra el compromiso social a su programa
Su compromiso con el medio ambiente es ineludible. Son ya generaciones de escolares involucradas en la responsabilidad de contribuir a la preservación de la naturaleza. En esta edición esa implicación vuelve a materializarse con proyectos en los que no solo se redobla la defensa del entorno natural, sino que son un verdadero ejemplo de compromiso social, en los que se une el aprendizaje con el deber de colaborar con la sociedad en la que crecen y se forman.
Es lo que hoy se denomina aprendizaje por servicio para formar buenos ciudadanos capaces de mejorar la sociedad y no solo su currículo personal. Se trata de un método en el que niños y jóvenes en edad escolar pueden contribuir a hacer un mundo mejor arreglando el parque cercano a su escuela; aliviando la soledad de los mayores o contando cuentos a niños más pequeños.
Es lo que hoy se denomina aprendizaje por servicio para formar buenos ciudadanos capaces de mejorar la sociedad y no solo su currículo personal. Se trata de un método en el que niños y jóvenes en edad escolar pueden contribuir a hacer un mundo mejor arreglando el parque cercano a su escuela; aliviando la soledad de los mayores o contando cuentos a niños más pequeños.
Son varios los centros que participan con este tipo de propuestas en el programa de la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre. Llama especialmente la atención el componente solidario del CRA de Teo (A Coruña), que ha emprendido la plantación de árboles autóctonos para enviar al CEIP Santo Paio de Abaixo (Pontevedra) y reforestar los montes quemados de Redondela.
En el ámbito del compromiso intergeneracional, los más pequeños (infantil y primaria) del CPR Santa Apolonia (A Coruña) promueven el proyecto Abuela Pepa, que consiste en la construcción de un huerto vertical en el asilo y un paseo fluvial que une el colegio precisamente con la residencia de mayores. En ese mismo contexto de convivencia y estímulo con los mayores, los alumnos del EEI San Roque (Lugo) realizan adornos de reciclaje y calendarios para el mercado solidario que organiza una de las residencias de mayores próxima a la escuela.
Los estudiantes del CEIP Anexo A Lomba (Pontevedra) contribuyen a paliar la pobreza con una plantación solidaria de lechugas en su huerto urbano para entregarlas a Cáritas y que las lleve al comedor social.
Por último, la asociación Sustinea, de Ourense, presta un servicio a la comunidad con actividades con el Centro de Menores de Monteledo, con la Asociación ADO de personas con síndrome de Down, jóvenes de pisos de acogida y tutelados en Ourense, hijos de mujeres inmigrantes, de personas drogodependientes y reclusas en el Centro Penitenciario de Pereiro de Aguiar.