Los alumnos del CPR Estudio de Chandebrito aspiran a confluir en la catedral de Santiago
Contra el covid, organización. Así parece que piensan en el muy activo CPR Estudio de Chandebrito (Nigrán), un auténtico referente en el programa Voz Natura. Y organización quiere decir, también, continuidad. Porque lo que empiezan un año lo continúan al siguiente. Y así, ya el curso pasado los alumnos de secundaria hicieron frente al reto de Voz Natura y salieron al Camino de Santiago a recoger residuos y a lograr que entre Caldas y Compostela hubiera plásticos cero, mientras elaboraran un mapa virtual de vertederos. «Es lo que llamamos Camino Sostenible», dice uno de los profesores, Juan Ojea.
El coronavirus los frena, pero no los desanima. «Este año ya estamos trabajando -continúa Juan Ojea-, y cada curso se encarga de una ruta jacobea, documentándose sobre patrimonio, personajes, fiestas…». La traca final será hacer cada uno de ellos su tramo final correspondiente, con el fin de confluir todos en la catedral de Santiago, algo que ahora mismo, como es lógico, está en el aire, pero muestran la determinación de hacerlo si es posible. «¡Eso sería lo gordo!», exclama ilusionado Juan. Y añade: «Y sería muy bonito». Mientras tanto, tienen que contentarse con ver esos lugares por el Street View de Google.
Lo cierto es que en las aulas del CPR Estudio de Chandebrito -poco más de tres centenares de alumnos- el Camino de Santiago es lo que en los periódicos se llama «una percha»: algo de lo que se puede colgar todo lo demás. Y así, en Matemáticas quienes estudian los números romanos aprovechan para hablar del pasado de Galicia y de los peregrinos. Cuando toca la clase de Música, ahí están las canciones típicas de las villas y aldeas por donde pasa la ruta jacobea. Si es Biología, es la hora de la fauna y flora de las vías de peregrinación.
La otra pata de la mesa es el mantenimiento, el continuar lo ya empezado, «lo que ya funciona», en palabras del profesor Ojea. Y eso quiere decir cuidar el huerto, potenciar el reciclaje, colaborar con una oenegé (en este caso, con una que trabaja en Senegal)…Y todo eso, al aire libre, siempre y cuando no llueva. Todas las clases que se pueden dan fuera se dan fuera, sin excepción. «Y ahora encontramos los cogomelos», finaliza Juan Ojea, uno de los grandes dinamizadores de Voz Natura.
El coronavirus los frena, pero no los desanima. «Este año ya estamos trabajando -continúa Juan Ojea-, y cada curso se encarga de una ruta jacobea, documentándose sobre patrimonio, personajes, fiestas…». La traca final será hacer cada uno de ellos su tramo final correspondiente, con el fin de confluir todos en la catedral de Santiago, algo que ahora mismo, como es lógico, está en el aire, pero muestran la determinación de hacerlo si es posible. «¡Eso sería lo gordo!», exclama ilusionado Juan. Y añade: «Y sería muy bonito». Mientras tanto, tienen que contentarse con ver esos lugares por el Street View de Google.
Lo cierto es que en las aulas del CPR Estudio de Chandebrito -poco más de tres centenares de alumnos- el Camino de Santiago es lo que en los periódicos se llama «una percha»: algo de lo que se puede colgar todo lo demás. Y así, en Matemáticas quienes estudian los números romanos aprovechan para hablar del pasado de Galicia y de los peregrinos. Cuando toca la clase de Música, ahí están las canciones típicas de las villas y aldeas por donde pasa la ruta jacobea. Si es Biología, es la hora de la fauna y flora de las vías de peregrinación.
La otra pata de la mesa es el mantenimiento, el continuar lo ya empezado, «lo que ya funciona», en palabras del profesor Ojea. Y eso quiere decir cuidar el huerto, potenciar el reciclaje, colaborar con una oenegé (en este caso, con una que trabaja en Senegal)…Y todo eso, al aire libre, siempre y cuando no llueva. Todas las clases que se pueden dan fuera se dan fuera, sin excepción. «Y ahora encontramos los cogomelos», finaliza Juan Ojea, uno de los grandes dinamizadores de Voz Natura.