Los centros protegen y recuperan el patrimonio etnográfico de Galicia
Cuidar y defender el patrimonio natural gallego ha sido y es el objetivo principal de los trabajos Voz Natura desarrollados desde 1997, un total de 1.899. Sin embargo, profesores y alumnos también se detienen en la protección de otros tipos de patrimonio: el etnográfico, el cultural y hasta el histórico.
De los 244 centros que participan este curso, algunos han incluido estas actividades en su plan de trabajo y, otros, lo han hecho su lei motiv. En este último grupo se encuentra la Asociación Cultural O Castro (Baión-Vilanova de Arousa). Esta entidad agrupa a cerca de 1.500 personas de diversas edades que este año, por segunda vez, desarrollan un trabajo titulado “Recuperamos as fontes”. Su objetivo es recuperar las fuentes que antaño suministraban agua potable a las aldeas de Baión con la finalidad de «garantir a potabilidade das augas verificando a súa calidade e humanizando a súa contorna coa plantación de árbores», defienden. Este trabajo incluye también la limpieza y catalogación de las fuentes, algo que repercutirá en beneficio de todos los vecinos de la zona.
De río y mar
El colegio de Domaio y el de Cervo realizan trabajos ejemplares sobre la protección de molinos de río. Los primeros se fijan también en los lavaderos de su zona y, los segundos, trabajan en el tramo de desembocadura del río Xunco donde recuperan, limpian y estudian hasta seis instalaciones en distinto grado de conservación. Su meta es realizar un proyecto para difundir entre la comunidad escolar y promover así el conocimiento de estas instalaciones.
Otro programa llamativo y ambicioso es el que desarrollan en la escuela infantil de Muros. Dentro de sus posibilidades —y poniendo el acento en la concienciación—, estos pequeños y sus maestros protegen un molino de marea en Muros y los del río Louro y Esteiro. Sus actuaciones pretenden servir de ejemplo a los adultos e implicarlos en la protección de estos elementos del patrimonio muradano.
En tierra
Entre las propuesta de protección del patrimonio gallego no podía faltar el Camino de Santiago. En este caso, es la comunidad del CEIP Eduardo Cela Vila, de Triacastela, los encargados Voz Natura de vigilarlo, limpiarlo y adecentarlo en su zona de influencia.
Dentro del programa de la Fundación Santiago Rey Fernández-Latorre la defensa del patrimonio arquitectónico es labor, por ejemplo, del IES As Insuas cuyos alumnos recorren Muros para denunciar el feísmo arquitectónico frente al patrimonio tradicional. Y, de la protección del patrimonio histórico se encargan los alumnos del CEIP Curros Enríquez, de Celanova, a través de un proyecto en el castro de Castromao gracias al cual realizan plantaciones y cuidan la zona.